¿QUIEN SOY?


Me llamo, que no soy, Rafael.

Mis nombres familiares son Tímermans por mi padre, y del Olmo por mi madre. Nací en Madrid y mi familia es de Cádiz y de Cuenca.

Tengo tres hijos maravillosos (claro). Dos niños de 13 y 15 años y una princesa de 5 años. Son la razón de ser de mi vida. Sin duda.

Soy Médico especialista en Medicina del Trabajo. He trabajado en Servicios de Prevención propios (dentro de las empresas) y ajenos (prestando servicios a las empresas). En botiquines de fábricas y en consultas de oficinas.

He atendido a trabajadores de la construcción, Directores Generales, médicos, mineros, trabajadores de cadenas de fabricación de coches, periodistas, políticos, informáticos... Todos con algo en común: son personas. Solo personas. Y nada menos que personas.

Desde hace 5 años he alimentado un blog sobre Medicina y Trabajo. Casi 200 entradas y más de 2.500 visitas mensuales.

Escribo porque quiero escribir lo que pienso. Porque tengo cosas que decir, aunque a lo mejor a nadie interesa ni nadie está de acuerdo conmigo.

Me gusta escribir. Plasmar en un papel pensamientos. Adornarlo. Pulirlo.

Me gusta discutir. Me gusta llevar la contraria. No por el gusto de llevarla, pero me gratifica pensar distinto que los demás. Y no me importa nada que los demás discrepen de mí.

No soporto los que se enfadan por una opinión mía. No aguanto a los que tienen opiniones inamovibles. A mi se me puiede convencer de casi cualquier cosa, pero hay que tomarse el trabajo de argumentarlo.

Desprecio a los que se creen buenos y me demuestran que no lo son. No creo a nadie por lo que dice, y según por lo que hacen.

Intento ser bueno con todos. Siempre. Cada día.

Me equivoco todos los días. He hecho daño a gente que no lo merecía, y aunque alguna lo mereciera he hecho mal.

Cada día nace un día nuevo. Vivámoslo.